Aprovechando el poder de la juventud para ayudar a los estudiantes sin hogar

Mientras crecía, mis padres siempre insistieron en la importancia de estar involucrado con el servicio. Comprendí que servir a los demás era el núcleo de las enseñanzas bahá’ís – y eso siempre me motivó a pensar en formas de impactar en mi comunidad.

Durante la escuela secundaria, pasé una cantidad significativa de tiempo como voluntario para apoyar a las personas que experimentaban la falta de hogar. A través de estos esfuerzos, conocí una necesidad aún mayor: estudiantes que experimentan la indigencia. Según los datos más recientes del Centro Nacional para la Educación de los Desamparados (NCHE en inglés), en los Estados Unidos, aproximadamente 1,3 millones de niños en edad escolar que asisten a escuelas públicas experimentan la carencia de vivienda. Estos estudiantes hacen malabares entre elegir dónde dormir y terminar sus tareas cada noche. Para algunos estudiantes, sus familias han vivido en la pobreza durante generaciones, mientras que otros han perdido recientemente sus trabajos y se han encontrado viviendo en moteles, refugios, autos o en la calle. 

Mi corazón se derrumbó cuando me enteré de la posibilidad de que un adolescente, como yo, pudiera experimentar esto. Como adolescente con vocación activista, sabía que tenía que hacer algo al respecto. ¡Si tan solo existiera una forma de arreglarlo!

Fue entonces cuando recurrí a los escritos bahá’ís para orientarme y encontré esta cita sobre algo muy valorado en la f2e bahá’í: la educación. Bahá’u’lláh, el fundador y profeta de la fe bahá’í, escribió que «el conocimiento es un verdadero tesoro para el hombre y una fuente de gloria, de generosidad, de gozo, de exaltación, de alegría y de regocijo para él».

La investigación ha demostrado que dar a los estudiantes la oportunidad de avanzar en su educación es una de las formas más eficaces de romper el ciclo de la pobreza. Los escritos bahá’ís enfatizan que «Potencialmente, todo niño es la luz del mundo y, al mismo tiempo, su oscuridad; por consiguiente, la cuestión de la educación debe ser considerada como de importancia primordial».

Esta comprensión me llevó a cofundar una organización sin fines de lucro llamada EEqual. EEqual es una organización tipo 501(c)3 dirigida por jóvenes, dedicada a nivelar las oportunidades para los estudiantes en situación de pobreza. Invertimos en la educación de estudiantes en extrema pobreza o sin hogar a través de becas y tutorías.

En esencia, EEqual utiliza el poder de la juventud para movilizar nuestra visión hacia la acción. Al ser una organización sin fines de lucro dirigida por jóvenes significa que los adolescentes que son defensores apasionados del cambio hacen toda la programación, la recaudación de fondos y el trabajo administrativo. EEqual proporciona becas para enviar a la universidad a los estudiantes que se encuentran sin hogar y crea clubes escolares en todo el país donde los líderes estudiantiles pueden encabezar un ambiente educativo más equitativo en sus comunidades locales.

Creo que EEqual, y los jóvenes que la impulsan, son un ejemplo perfecto de «Una generación de jóvenes se siente impulsada a tomar acción motivada por una visión convincente de cómo pueden contribuir a la construcción de un mundo nuevo». A través del servicio, espero que cada uno de nosotros comience a pensar más profundamente sobre la importancia de la educación para las generaciones futuras. La educación es fundamental, y debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para garantizar que cada estudiante, sin importar sus antecedentes económicos, tenga la misma oportunidad de seguirla con seguridad y comodidad.

Embarcarme en este camino de servicio fue mucho más desafiante de lo que había previsto. Como una organización dirigida por jóvenes, nuestra edad a menudo hace que los adultos se vuelvan escépticos y pasen por alto nuestro deseo de causar un impacto. A pesar de estos desafíos, mi equipo y yo continuamos avanzando, manteniéndonos centrados en nuestra misión y llegando a aquellos que están dispuestos a ayudar.

Si eres joven, por favor recuerda que tu habilidad para marcar la diferencia no depende de tu edad. Tu voz y tus acciones pueden y ya están transformando el mundo. Cuando se trata de transformar el marco mismo de la sociedad, debemos empezar a integrar más fuertemente las voces de los jóvenes. Los jóvenes de hoy en día están más entusiasmados y ansiosos por reimaginar el mundo tal como lo conocemos. Así que, por favor, ¡déjennos hacerlo!

Si eres un joven, o si sabes de algún joven que pueda estar interesado en formar parte de EEqual, ¡por favor, contáctanos!