5 poderosas oraciones por el crecimiento y desarrollo espiritual

Si estás deprimido y te gustaría sentirte más conectado con Dios, puedes considerar la posibilidad de orar diariamente por tu crecimiento espiritual.

Los escritos bahá’ís dicen que la oración «crea espiritualidad… atención y sentimientos celestiales». Los versos que fueron revelados por las Manifestaciones de Dios -Abraham, Zoroastro, Moisés, Buda, Krishna, Jesucristo, Muhammad, el Báb y el fundador de la Fe bahá’í, Bahá’u’lláh- pueden sanar, revivir y fortalecer nuestras almas.

A continuación, se presentan cinco oraciones de los escritos bahá’ís que se nos anima a reflexionar y recitar para nuestro crecimiento y desarrollo espiritual.

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1. Una oración por el crecimiento espiritual, la pureza y la tranquilidad

En esta oración para el crecimiento espiritual que Bahá’u’lláh reveló, pedimos a Dios tranquilidad, alegría y un corazón puro:

Crea en mí un corazón puro, oh mi Dios, y renueva una conciencia tranquila dentro de mí, oh mi Esperanza. Por medio del espíritu del poder, confírmame en Tu Causa, oh mi Bienamado, y con la luz de Tu gloria, revélame Tu camino, oh Tú que eres el Objeto de mi deseo. Mediante la fuerza de Tu transcendente poder, elévame hasta el cielo de Tu santidad, oh Fuente de mi ser, y con las brisas de Tu eternidad, alégrame, oh Tú que eres mi Dios. Haz que Tus eternas melodías me inspiren tranquilidad, oh mi Compañero, y que las riquezas de Tu antiguo semblante me libren de todo salvo de Ti, oh mi Maestro, y que las nuevas de la revelación de Tu incorruptible Esencia me traigan alegría, oh Tú que eres el más manifiesto de lo manifiesto y el más oculto de lo oculto.

2. Una oración por el crecimiento espiritual y la cercanía a Dios

Esta oración nos acerca a Dios al pedir que nos liberemos de las limitaciones que impiden nuestro progreso espiritual. Bahá’u’lláh escribió:

¡Oh mi Señor! Haz de Tu belleza mi alimento, y de Tu presencia, mi bebida; de Tu agrado, mi esperanza, y de Tu alabanza, mi acción; de Tu recuerdo, mi compañero, y del poder de Tu soberanía, mi socorro; de Tu aposento, mi hogar, y de mi morada, la sede que Tú has elevado por encima de las limitaciones impuestas a quienes están separados de Ti como por un velo. Tú eres, verdaderamente, el Todopoderoso, el Todoglorioso, el Omnipotente.

3. Una oración por el desarrollo y la renovación espiritual

Abdu’l-Bahá, el hijo de Bahá’u’lláh y el intérprete autorizado de los escritos bahá’ís, reveló esta reconfortante oración. Es perfecta para calmar la mente y refrescar el espíritu:

¡Oh Dios! Refresca y alegra mi espíritu. Purifica mi corazón. Ilumina mis poderes. Dejo todos mis asuntos en tus manos. Tú eres mi guía y mi refugio. Ya no estaré triste ni afligido; seré un ser feliz y alegre. ¡Oh Dios! Ya no estaré lleno de ansiedad, ni dejaré que las aflicciones me atormenten, ni me absorban las cosas desagradables de la vida. ¡Oh Dios! Tú eres más amigo mío que yo lo soy de mí mismo. A ti me consagro, oh Señor.

4. Una oración por la justicia y el progreso espiritual

Para crecer espiritualmente, tenemos que trabajar por la justicia y mejorar nuestro mundo. Bahá’u’lláh reveló esta oración, para que podamos ser más justos y dignos de confianza:

Te imploro, oh mi Dios, por toda la gloria trascendente de Tu Nombre, que atavíes a Tus amados con el manto de la justicia e ilumines su ser con la luz de la honradez.

Tú eres Quien tiene poder de hacer lo que Le plazca y Quien sujeta con Su mano las riendas de todas las cosas, visibles e invisibles.

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5. Una oración por el crecimiento espiritual y el amor divino

Tenemos que amar a Dios para que su amor nos alcance. Esta hermosa oración implora a Dios que nos haga brillar con el fuego del amor divino mientras seguimos nuestro camino de servicio a la humanidad. Abdu’l-Bahá escribió:

¡Oh mi Dios, oh mi Dios! Este siervo Tuyo ha avanzado hacia Ti, vaga apasionado por el desierto de Tu amor, camina por el sendero de Tu servicio, espera Tus favores, anhela Tu munificencia, confía en Tu reino y está embriagado con el vino de Tu dádiva. ¡Oh mi Dios! Aumenta el fervor de su devoción por Ti, la constancia de su alabanza de Ti y el ardor de su amor por Ti.

Verdaderamente, Tú eres el Más Generoso, el Señor de gracia abundante. No hay otro Dios más que Tú, el Perdonador, el Misericordioso.

Que estas oraciones por el crecimiento espiritual revitalicen tu espíritu, traigan consuelo a tu alma y te inspiren en tu camino de servicio a la humanidad.