Las opiniones expresadas en nuestro contenido pertenecen al autor únicamente, y no representan puntos de vista de autoridad en la Fe Bahá’í.
Ahora que hemos aprendido un poco sobre las creencias hindúes en los ensayos anteriores de esta serie, estamos casi listos para conocer a nuestros vecinos hindúes.
Sin embargo, primero tendremos que aprender un poco más sobre Brahman y algunas palabras que suenan parecido. ¿Por qué querría hacerlo? Porque, como dicen las enseñanzas bahá’ís, y como escribió Abdu’l-Bahá:
Hoy es necesidad imperiosa la unidad y la armonía entre los amados del Señor, pues deberían tener entre ellos solamente un corazón y un alma, y deberían, en la medida que de ellos dependa, resistir solidariamente la hostilidad de todos los pueblos del mundo; deben poner fin a los ignorantes prejuicios de todas las naciones y religiones, y deben dar a conocer a todo miembro de la raza humana que todos son las hojas de una sola rama, los frutos de un solo árbol.
Es con ese espíritu de unidad, creen los bahá’ís, que podemos acercarnos a las personas de todas las creencias comprendiendo la unidad esencial de la religión.
RELACIONADO: ¿Creen los hindúes en un solo Dios o en muchos?
Los hindúes a veces se enfrentan a la desaprobación en los países occidentales porque tienen un concepto exaltado de Dios en su interior. Para los hindúes, el Dios que llevamos dentro se llama «Atman» -una palabra que básicamente significa el yo- y este es y no es Brahman [Dios].
Es Brahman (y el Brihadaranyaka Upanishad dice que lo es -ver 4.4.5) en el sentido de que no es otro que Brahman. El ser que sentimos en nuestro interior es divino. Somos creados, afirma la Biblia, a imagen de Dios y su imagen está dentro de nosotros. Pero no somos la totalidad de Dios; reflejamos una pequeña parte, y esa parte los hindúes la conocen como Atman.
Hay otra palabra similar en sánscrito: Brahma. Del mismo modo que los occidentales distinguen a veces entre Dios y su palabra o voluntad -el logos divino-, los hindúes suelen distinguir entre el Brahman inmutable y Brahma, una fuerza derivada que creó el mundo y de la que evoluciona la humanidad.
Brahman no tiene forma ni género; a menudo se le da a Brahma una forma masculina, casado con Saraswati, y se le suele representar con cuatro caras, una en cada dirección. Para un hindú, la idea de que un dios esté casado no hace más que subrayar que la fuerza creadora es tanto masculina como femenina.
Brahma forma parte de lo que a veces se denomina la Trinidad hindú (Trimurthi) de dioses superiores: Brahma, Vishnu y Shiva. En este esquema, Brahma es visto como creador, Vishnu como preservador y Shiva como destructor/reformador. (La palabra relacionada «Brahmán», por cierto, se refiere a un sacerdote hindú o a miembros de la clase sacerdotal).
La complejidad de la visión hindú sobre Dios
Solo algunos hindúes llaman Brahma al Dios creador. El uso del término no es tan común como podríamos pensar. Más bien, el nombre de Dios depende en gran medida del lugar de la India en el que uno se haya criado o de la familia en la que haya nacido. Algunos hindúes llaman al Dios Supremo Shiva (o Siva), otros Vishnu, otros Devi (o la Diosa).
Eso, sin embargo, será más fácil de determinar una vez que conozcamos a nuestros vecinos hindúes. Por ahora, solo trata de recordar que hay cuatro ramas principales del hinduismo: Vaishnavismo, Saivismo, Shaktismo y Smartismo. Nos centraremos en las tres primeras.
La visita: descifrando las denominaciones
Bien, ahora estamos listos para aventurarnos a conocer a nuestros vecinos. Sepa que nuestros vecinos, como hindúes practicantes, han jurado respetar diez atributos espirituales, llamados Restricciones Védicas o yamas, que se encuentran en los Upanishads Shandilya y Varuha: no lastimar, veracidad, no robar, restricción sexual y modestia (bramacharya), paciencia, constancia, compasión, honestidad, moderación y pureza. En resumen, se comprometen a tener buen carácter, así que relájate: serás bienvenido y muy bien tratado cuando conozcas a tus vecinos hindúes.
Lleva flores o dulces, no platos de carne; la mayoría de los hindúes son vegetarianos. Además, entrega tus regalos dentro de la casa, o fuera si el anfitrión sale a recibirte; muchos hindúes consideran descortés quedarse en la puerta. Sigue sus indicaciones. Es posible que tengas que dejar los zapatos en la puerta.
RELACIONADO: ¿Se unificarán alguna vez el Este y el Oeste?
Una de las primeras cosas que podrías observar -más que nada en las damas de la casa, aunque los hombres también pueden llevarlo- es un punto en la frente, normalmente justo encima y entre las cejas. Puede que no signifique nada para la mujer que lo lleva, salvo que es una costumbre hindú y que a ella le gusta. Sin embargo, por lo general, representa simbólicamente el «tercer ojo»: la importancia de ver las cualidades espirituales, no solo las físicas. Esta pequeña marca se llama bindi en el idioma hindi, y pottu en el idioma tamil que se habla en el sur de la India. Tradicionalmente, un punto rojo significaba que el portador estaba casado, y un punto negro que no lo estaba, pero el color puede significar ahora simplemente que al portador le agrada ese color.
En general, las marcas en la frente se llaman tilaka en sanksrit (Tilak en hindi), que significa «marca» o «peca», pero pueden ser más dramáticas que el simple bindi. En los hombres se pueden ver líneas que van verticalmente desde la línea del pelo por encima de la frente y que bajan hacia las cejas con el aspecto de un collar en forma de «V» o de «U», a veces con un punto o una llama en el interior o una especie de colgante en el puente de la nariz. Por lo general, en Occidente solo se ve en ocasiones religiosas especiales o si se encuentra un sacerdote hindú. Si lo vieras, sabrías que tus vecinos son vaishnavitas y que llaman a su Dios Supremo Vishnu.
Si, en lugar de líneas verticales en la frente, ves líneas horizontales (normalmente tres superpuestas), habrás descubierto que la familia es shaivita y que llaman a su Dios Supremo, Siva (también conocido como Shiva). Esas tres líneas representan las tres cosas que atan al alma y de las que los saivitas buscan liberarse: el ego (anava), las malas acciones (mal karma) y la ilusión (maya).
Si se viera una sola línea o un rectángulo en la frente, el portador sería probablemente un shakta, un seguidor del shaktismo, y su nombre para el Ser Supremo sería Shakti o Devi, este último significa la Diosa.
Sin embargo, todas estas marcas tradicionales significan algo más grande e importante: que acabas de conocer a una persona de fe, alguien que vive según una antigua y venerable tradición de autoconciencia y superación, al igual que los bahá’ís.
Comentarios
Inicia sesión o Crea una Cuenta
Continuar con Googleo