Cómo convertir su matrimonio en una fortaleza para el bienestar

Las enseñanzas bahá’ís describen el verdadero matrimonio como una “institución sagrada” y “una fortaleza para el bienestar.” ¿El suyo se siente así? Si está a punto de casarse, ¿Cree que se sentirá así?

Se puede, si usted convierte esto en una meta global desde el principio. Primero, claro, necesitará los ingredientes básicos de amor y fidelidad:

El matrimonio bahá’í es el compromiso de ambas partes, de una con la otra, y el apego mutuo de mente y corazón. – ‘Abdu’l-Bahá, Selección de los escritos de ‘Abdu’l-Bahá, página 162

Los escritos bahá’ís abolen los matrimonios arreglados que durante tanto tiempo fueron la norma en muchas culturas, y deja la elección de una pareja a usted:

… cada uno de ellos debe poner el máximo cuidado en informarse cabalmente sobre al carácter del otro, para que la alianza obligatoria establecida entre ellos sea un lazo que perdure para siempre. El propósito debe ser éste: convertirse en amorosos compañeros y camaradas, y estar unidos uno con el otro, por el tiempo y la eternidad… – Ibíd., Página 162

La elección de una pareja todavía requiere la debida consideración de todos los involucrados, porque la pareja no son los únicos involucrados en un matrimonio. Sus familias juegan un rol importante, también. Hoy en día, muchas sociedades han visto el resurgimiento de la idea del consentimiento de los padres antes del matrimonio. Este consentimiento, vital para los matrimonios bahá’ís, mantienen la unidad y demuestra respeto y fidelidad hacia los padres. Los bahá’ís siempre buscan el consentimiento de los padres antes del matrimonio, para construir y reforzar los vínculos y lazos que el matrimonio crea entre las dos familias.

El consentimiento de los padres funciona, porque los padres a menudo pueden prever problemas que uno o ambos de los individuos que desean casarse no pueden o podrán reconocer – y aun cuando lo hagan, no lo admitirán. Típicamente, ellos piensan, “el amor lo conquista todo”, y ven su amor lo suficientemente fuerte para resistir sus problemas, o incluso superarlos. Esto puede ser cierto en un pequeño porcentaje de casos, pero mirando el número creciente de divorcios y la prevalencia de la violencia doméstica hace obvia la sabiduría de la aprobación de los padres. Idealmente, las parejas que respetan los puntos de vista de los padres, consideran sus argumentos y entonces trabajan en los asuntos planteados para tener matrimonios mucho mejores:

El verdadero matrimonio… consiste en que el esposo y la esposa se unan tanto spiritual como físicamente, para que siempre se mejoren mutuamente la vida espiritual y gocen de unidad sempiterna en todos los mundos de Dios. – Ibíd., página 162

‘Abdu’l-Bahá nos dice:

Entre la masa del pueblo el matrimonio es un lazo físico, y esa unión sólo puede ser transitoria, pues al final está condenada a una separación física. – Ibíd., Página 160

Pero con la participación de ambas familias, y la comprensión que el matrimonio puede ser un santuario espiritual para la pareja para siempre, el matrimonio puede convertirse en:

… haces de luz de Tu abundante gracia. – Ibíd., página 163.

… una fortaleza para el bienestar y la salvación… – Bahá’u’lláh, Oraciones bahá’ís, página 192

… el medio de atraer gracia perpetua, para que de la unión de estos dos mares de amor surja una ola de ternura que vierta en la playa de la vida perlas de pura y hermosa descendencia. – ‘Abdu’l-Bahá, Oraciones bahá’ís, página 194.

… los signos de armonía y unidad hasta el fin de los tiempos. – ibíd., página 195