Las opiniones expresadas en nuestro contenido pertenecen al autor únicamente, y no representan puntos de vista de autoridad en la Fe Bahá’í.
Tanto si buscas salud, felicidad, amor o éxito, el futuro lo puedes crear tú. Aquí tienes cinco formas de empezar a crear tu nuevo futuro desde hoy.
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1. Crea tu nuevo futuro cambiando tus pensamientos
Cuando decides dejar de revivir tu pasado y empezar a crear tu nuevo futuro, puedes sentir cierta resistencia porque es más difícil predecir lo que va a ocurrir después, por eso el cambio puede resultar incómodo para muchas personas.
Es probable que las dudas y el sentimiento de incertidumbre inunden tu cerebro y tu cuerpo cuando empieces a pensar que lo que quieres tal vez no exista o sea demasiado difícil de conseguir. Es importante recordar que el hecho de tener un pensamiento no significa que sea cierto. En una charla en Londres en 1913, Abdu’l-Bahá, una de las figuras centrales de la fe bahá’í, dijo:
No obstante, algunos pensamientos son inútiles para la persona; son como olas moviéndose en el mar, sin resultado.
No podemos dejar que los pensamientos negativos e inútiles nos disuadan de alcanzar nuestros objetivos. Así que, cada vez que un pensamiento negativo entre en tu mente, tienes que pensar instantáneamente en un pensamiento positivo y alentador que esté definido por tu visión del futuro. En una charla en París en 1911, Abdu’l-Bahá dijo:
Cuando se os presente un pensamiento de guerra, oponedle uno más fuerte de paz. Un pensamiento de odio debe ser destruido por uno más grande de amor. Los pensamientos de guerra traen consigo la destrucción de toda armonía, bienestar, tranquilidad y felicidad.
Los pensamientos de amor son los forjadores de hermandad, paz, amistad y felicidad.
2. Crea tu nuevo futuro tomando nuevas decisiones
Si quieres empezar a tener experiencias más positivas, tienes que empezar a tomar mejores decisiones. Crea nuevos hábitos que mejoren tu salud y bienestar general.
Por ejemplo, en lugar de ver una película de ficción triste, puedes ver un documental inspirador. En lugar de jugar videojuegos, puedes dedicar tiempo a la oración, la meditación y la reflexión. Planifica intencionadamente días más productivos y beneficiosos.
3. Crea tu nuevo futuro haciendo las paces con los demás
Hacer las paces con las personas que te han hecho daño puede ser una de las nuevas elecciones que decidas hacer porque aferrarse a la ira y el resentimiento del pasado es físicamente insano, emocionalmente agotador y «espiritualmente venenoso». En una carta dirigida a una persona en 1992, la Casa Universal de Justicia, el órgano de gobierno mundial de la fe bahá’í, escribió:
Alimentar un agravio u odio contra otra alma es espiritualmente venenoso para el alma que lo alimenta, pero esforzarse por ver a otra persona como un hijo de Dios y, por muy atroces que sean sus actos, intentar pasar por alto sus pecados por amor a Dios, elimina la amargura del alma, la ennoblece y fortalece. [Traducción provisional de Oriana Vento]
Además, en una carta escrita en nombre de Shoghi Effendi, el Guardián de la fe bahá’í, a un individuo en 1951, dice:
Cuando surjan críticas y palabras desagradables dentro de una comunidad bahá’í, no hay otro remedio mas que olvidar el pasado y persuadir a todos los afectados para que se conviertan en “hojas nuevas”, y por amor a Dios y a su Fe se abstengan de mencionar los temas que han conducido a malentendidos y desavenencias. Cuanto más discutan los amigos y mantengan, cada uno por su lado, que su punto de vista es el correcto, peor se pone la situación.
Cuando vemos la condición en que se encuentra el mundo hoy en día, debemos de seguro olvidar esos malestares de orden interno, completamente insignificantes, y avanzar, unidos, hacia el rescate de la humanidad.
Para sanar del pasado, necesitamos perdonar, dejar ir, seguir adelante y enmendar las cosas si podemos, mientras ponemos nuestra atención y energía en crear un futuro más brillante para nosotros y para nuestro mundo.
4. Crea tu nuevo futuro mediante la visualización
¿Cómo sería tu nuevo futuro? ¿Cómo pensarías, actuarías y sentirías? Es importante dedicar tiempo cada día a visualizar específicamente quién quieres ser y qué quieres atraer hacia ti, y practicar sintiendo esas emociones como si ya las tuvieras. Según » Star of the West», hay «dos fases distintas del optimismo»:
Una se basa en la suposición de las condiciones, que la mente objetiva ha concebido primero e imaginado, por así decirlo, en las paredes de la mente subjetiva. Si mantenemos este pensamiento o imagen sin vacilar, es posible que las cosas sucedan. Podemos iluminar nuestros propios caminos con pensamientos felices y alegres, y ayudar a elevar a otros que se encuentran en estados mentales negativos. Pero este esfuerzo debe ser diligentemente continuado, porque todo depende de nuestro propio poder para mantener las imágenes formadas. [Traducción provisional de Oriana Vento]
«Cuando… viste esa imagen en tu mente, lo siguiente que supiste fue que empezaste a sentir la emoción como si estuvieras viviendo en esa realidad futura en el momento presente. Y podríamos decir entonces que, en el momento en que empezaste a sentir la emoción, el pensamiento se convirtió en la experiencia en tu mente», explicó el Dr. Joe Dispenza en el episodio dos de su serie «Rewired» en Gaia.com.
«Le estabas dando a tu cuerpo una muestra o un anticipo del futuro. …Empezaste a pensar en todas las decisiones que tenías que tomar y las escribiste. Empezaste a pensar en todas las experiencias que te llevarían a esa visión, todos esos objetivos. Y cada vez que escribías esas metas, sentías más de esos sentimientos y seguías repasándolos en tu mente para poder poner tu mente consciente en lo que querías».
5. Crea tu nuevo futuro a través de los cinco pasos de la oración
Si deseas claridad sobre cómo alcanzar tus objetivos, te recomiendo que sigas los cinco pasos de la oración para recibir guía y resolver problemas, que Shoghi Effendi transmitió a Ruth Moffett, una bahá’í que publicó su recuerdo de los siguientes pasos:
Ore y medite sobre el punto. Utilice las oraciones de las Manifestaciones ya que ellas poseen poder mayor. Aprenda a permanecer en el silencio de la contemplación durante unos minutos. Durante esta comunión profunda, tome el paso siguiente.
Tome una decisión y manténgala. Esta decisión habitualmente nace en un destello hacia el final o durante la contemplación. Puede parecer casi imposible de lograr, pero si parece ser una respuesta a la oración o una forma de resolver el problema, tome de inmediato el paso siguiente.
Esté resuelto a llevar a cabo la decisión tomada. Muchos fracasan aquí. La decisión, que brota en una resolución se agosta y en lugar de ello se transforma en un deseo o en un vago anhelo. Cuando nace la resolución, tome de inmediato el siguiente paso.
Tenga fe y confianza. Que fluirá a través suyo el poder, aparecerá el camino correcto, se abrirá la puerta, le será dado el pensamiento correcto, el mensaje correcto, el principio correcto o el libro correcto. Tenga confianza y en verdad vendrá hacia usted la cosa correcta para llenar sus necesidades. Entonces, en el momento de levantarse de la oración, tome inmediatamente el quinto paso.
Actúe como si se hubiese recibido una respuesta a todo. Entonces proceda con energía incansable e incesante. A medida que actúe, usted se transformará en un imán que atraerá más poder hacia su ser, hasta que llegue a ser un canal sin obstrucciones para que el Poder Divino fluya a través suyo.
Como dijo el Dr. Joe Dispenza: «En el momento en que empieces a abrazar el sentimiento de empoderamiento, estarás dando un paso hacia tu éxito. En el momento en que estés enamorado de ti mismo y enamorado de la vida, crearás una igual. Y en el momento en que empiezas a sentirte agradecido y empiezas a sentirte completo, empieza tu curación. En el momento en que estés maravillado con la vida, tendrás una experiencia mística. Eso sí que es causar un efecto».
Entonces, ¿qué efecto vas a causar? ¿Qué nuevo futuro vas a crear? ¿Qué resultados deseados practicarás mentalmente para que «tu cerebro ya no sea un registro del pasado«, como dijo el Dr. Joe Dispenza, sino «un mapa hacia el futuro»?
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